Sinopsis
Llegó el momento de la hoguera. Iban a quemar a la bruja que, según los pueblerinos, estaba invocando al demonio. Pero, en realidad, solo estaba tratando de crear un conjuro para vencer al demonio que asotaba al pueblo con una sequía terrible.
La bruja, una mujer asombrosamente bella, observó el cielo. Las nubes cubrían poco a poco el sol, lo cual era buena señal de que el demonio se estaba alejando poco a poco del lugar.
Y mientras la amarraban en un pilar de madera, la mojaban con querosene y aceite y la rodeaban de paja seca, tuvo una visión. Vio el futuro, en donde las personas como ella vivían escondidos de los no mágicos y eran muy felices. Vio también a sus tataratataranietos que, constantemente, eran perseguidos por una sombra maligna que quería arrebatarles su poder. La bruja era muy poderosa y, antes de ser atrapada por la inquisición, tuvo una hija a quien le transfirió sus poderes y la entregó a sus parientes. Sabía que esa hija tendría descendencia a quien también le transferiría sus poderes, y así seguiría de generación en generación hasta que la sombra maligna los encontrara y se hiciera completamente fuerte para dominar el mundo y eliminar a la humanidad no mágica de la faz de la tierra.
Ya cuando era consumida por las llamas, la bruja pronunció un conjuro. Ese conjuro iba dirigida a su hija, para que siempre estuviese protegida de todo mal. Así, lo transmitiría de generación en generación. Lastimosamente, ese conjuro no duraría para siempre. Llegaría un momento en que se rompería y correrían peligro constantemente.
Antes de morir, la bruja tuvo la esperanza de que, cuando se rompiera ese hechizo, su descendencia fuese lo bastante fuerte para poder enfrentarse al mal sin problemas.
Cinco siglos después, el hechizo se rompió.
Si les gustó la sipnosis, pueden leer el resto de la novela aquí: http://www.literativa.com/historias/3486/windusty--la-ciudad-magica.html
Aun está escribiendose ;)
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